El Sistema Nervioso Central -2

La protección ósea de la médula que a su vez sirve como sostenedor de la posición corporal, puede ser útil tenerla en consideración para localizar la situación de las partes de la médula que inervan los distintas zonas corporales.

La mayoría de seres humanos nacemos con un total de 33 vértebras, contando entre ellas siete vértebras cervicales, doce torácicas, cinco lumbares, cinco sacras y cuatro coxígeas. Según vamos desarrollandonos, el número se reduce al irse fusionando las más inferiores para formar los huesos sacro y coccígeo, pasando a considerarse vértebras solo las 24 primeras, acabando en la L5 o lumbar 5. El comienzo de la médula espinal se sitúa un poco antes de su recubrimiento por la columna vertebral, estando adherida al bulbo raquídeo. El punto donde termina la médula puede variar de una persona a otra, culminando generalmente entre las vértebras L1 y L3.

En general, las conexiones nerviosas corresponden de la médula corresponden a la zona donde se encuentran. Así, en la parte de la médula situada en entre las vértebras torácicas se encuentran las conexiones nerviosas que inervan el tórax, y así sucesivamente. En lo que se refiere a los nervios que se conectan con la médula, poseemos un total de treinta y un pares, siendo ocho cervicales, doce torácicos, cinco lumbares, cinco sacros y uno coccígeo. Un punto a destacar es la presencia de dos zonas en los que la médula es algo más ancha, debido a que en dichas zonas se encuentran las conexiones nerviosas con las extremidades.

Entre las vértebras C4 y T1 existe una zona algo más ancha que el resto de la médula. Esta zona, conocida como intumescencia cervical, es más gruesa debido a que en este lugar se encuentran las conexiones nerviosas que conectan con las extremidades superiores

Hacia el extremo inferior de la médula puede observarse un engrosamiento, entre las que va de la vértebra T11 a la L1, denominado intumescencia lumbosacra. Se trata de la parte de la médula que inerva las extremidades inferiores, y que junto a la denominada cola de caballo conecta con las partes del cuerpo localizadas en el extremo inferior.

Partes de la médula

Se ha podido observar que la médula tiene diferentes conexiones nerviosas que inervan distintas zonas del cuerpo. Sin embargo, puede ser de interés analizar la estructura interna de la médula espinal.

Al igual que en el cerebro, en la médula nos encontramos tanto con sustancia gris como con sustancia blanca. Sin embargo, la disposición es inversa, estando la sustancia blanca situada en una posición externa y la gris en la parte interna de la médula. Generalmente la transmisión de la información se da de manera ipsilateral, es decir el lado derecho del cuerpo es tratado por la parte izquierda de la médula espinal mientras que el lado izquierdo se trabaja con la parte derecha.