El proceso reproductivo de las plantas con flores
El proceso reproductivo, especialmente en las plantas con flores, la cual es considerada como reproducción sexual. Las plantas con flores de forma sexual gracias a sus órganos reproductivos que se encuentran dentro de las flores, por medio de los cuales se producirá la fecundación y crecimiento de la semilla y el fruto.
En la gran mayoría de las flores se encuentran 4 conjuntos de piezas: Sépalos, pétalos, estambres y carpelos. Cada una de las piezas florales son una hoja modificada.
Las plantas que tienen flores necesitan un aporte de dos células por dos plantas distintas, o bien, algunos tipos de flores pueden ser hermafroditas, tenido flores con pistilo y estambres.
Las flores femeninas son las que tienen un pistilo, mientras que las flores masculinas tienen estambres. El proceso de reproducción sexual de las flores sigue un proceso muy específico, el cuál verás a continuación:
La producción de polen
La flor se encarga de producir los granos de polen o las esporas masculinas, algo que sucede en unas estructuras llamadas anteras por medio de un proceso de meiosis que da lugar a 4 esporas de polen por medio de una sola célula madre.
La polinización
Para que el proceso de reproducción de las flores necesita de los insectos para poder completarse. Cuando los insectos entran en la flor masculina para alimentarse de su néctar y después llevan el polen a las flores femeninas.
En algunos de los casos no se requiere la presencia de insectos para llevar a cabo la polinización, ya que los granos de polen pueden ser tan diminutos que son transportados por el aire.
La fecundación del óvulo
Cuando el polen entra en la flor femenina, esta desarrolla un tubo polínico que crece hasta llegar al interior del óvulo, en donde encuentra al saco embrionario.
La formación de las semillas y los frutos
Cuando el óvulo es fecundado por el polen, comienza una transformación en una semilla, mientras que el ovario que lo contiene se transforma en un fruto.
Los pétalos y otras partes, se marchitan y se caen. El ovario engorda poco a poco transformándose en el fruto. Los óvulos se van convirtiendo en semillas.
Algunos frutos son el limón, el tomate o la manzana. Todos ellos contienen dentro un gran número de semillas. De algunas plantas lo que comemos son las semillas, como el poroto, las habas o la chía.
Las semillas son muy resistentes y pueden aguantar muchos años sin germinar en una nueva planta. Lo harán cuando las condiciones de temperatura y humedad sean las adecuadas para que la nueva plantita crezca.
Los frutos y las semillas comestibles aportan al ser humano una buena cantidad de sustancias nutritivas, como vitaminas, proteínas, fibras y azúcares. Aunque no se debe comer nada más que los que sean comestibles, pues hay algunos que son venenosos y pueden causar graves trastornos en la salud.