Flora y fauna del período cuaternario
En el período cuaternario, la flora y la fauna se caracterizaron por desarrollar adaptaciones a los cambios climáticos globales y las fluctuaciones ambientales. Además, la distribución de especies vegetales y animales fue fuertemente influenciada por los ciclos glaciares-interglaciares.
Durante las fases interglaciares, se expandieron los bosques templados y las selvas. Estos ecosistemas proporcionaron hábitats favorables para el desarrollo de una gran diversidad de especies, en especial de mamíferos grandes como los mamuts, los rinocerontes, los leones y los osos.
En cambio, durante las glaciaciones, las condiciones ambientales más frías y secas llevaron a la desaparición de extensas superficies boscosas y la extinción de muchas especies animales. En estos períodos glaciares también se expandieron comunidades vegetales adaptadas al frío y la falta de humedad, como la tundra ártica y la estepa. Especies como los bisontes esteparios, los osos polares y los renos se adaptaron a las bajas temperaturas y prosperaron en esos ambientes fríos y secos.
La evolución humana.
Durante el Pleistoceno, hicieron su aparición los primeros homínidos, como el Homo habilis y el Homo erectus. Este último, en particular, se destacó por su capacidad de adaptarse a diversos entornos, lo que le permitió dispersarse desde África hacia Europa y Asia.
El Homo sapiens apareció aproximadamente hace 300.000 años y se distinguió por su mayor capacidad cognitiva y cultural. Durante el período interglaciar más reciente y el Holoceno, comenzó a establecer asentamientos permanentes y a desarrollar la agricultura, lo que posibilitó la formación de sociedades más complejas y el surgimiento de la civilización humana.
La evolución humana durante el Cuaternario no solo se destaca por los avances tecnológicos y culturales, sino también por la capacidad de los humanos para adaptarse a los cambios climáticos y ambientales de los últimos milenios.
Clima del Cuaternario
Durante cada una de estas glaciaciones, los casquetes de hielo y los glaciares se expandieron desde los polos hacia latitudes más cálidas, y de este modo cubrieron grandes extensiones continentales.
Entre las glaciaciones principales, tuvieron lugar los períodos interglaciares, que se caracterizaron por tener climas más cálidos. Durante estos intervalos, las temperaturas globales fueron elevadas, lo que produjo el retroceso de los hielos y la expansión de los climas templados y cálidos.